Asia emergente: dinámica pero fracturada
Author:
Wihtol, RobertISSN:
2695-6462DOI:
10.32418/rfs.2021.300.5026Date:
2021-10-07Keyword(s):
Abstract:
En los últimos setenta y cinco años, la región emergente de Asia se ha transformado más rápidamente que cualquier otra región. ¿A qué se debe este éxito? ¿Seguirá Asia liderando el mundo o tendrá que afrontar obstáculos en su crecimiento? Asia es políticamente diversa, con democracias, gobiernos híbridos y numerosos regímenes autoritarios, varios inestables. Los caminos hacia la prosperidad han cambiado, incluyendo el modelo de Asia Oriental, la “economía de mercado socialista” de China, la autosuficiencia de la India y la transición económica en Asia Central. Las deficiencias crónicas de la cooperación regional se deben a la juventud, dispersión y diversidad de los estados soberanos asiáticos. La emergencia de China amenaza con fracturar la región aún más. Aunque Asia Oriental está bien preparada para dirigir la recuperación económica a medida que la región se recupera de la crisis del Covid-19, sigue habiendo muchos retos. Los sistemas políticos y de gobierno son débiles. Las disputas territoriales, incluida la de Taiwán, podrían acabar convirtiéndose en conflictos abiertos. El capital humano está poco desarrollado y la población está envejeciendo. Por último, la región podría polarizarse entre Estados Unidos y China.
En los últimos setenta y cinco años, la región emergente de Asia se ha transformado más rápidamente que cualquier otra región. ¿A qué se debe este éxito? ¿Seguirá Asia liderando el mundo o tendrá que afrontar obstáculos en su crecimiento? Asia es políticamente diversa, con democracias, gobiernos híbridos y numerosos regímenes autoritarios, varios inestables. Los caminos hacia la prosperidad han cambiado, incluyendo el modelo de Asia Oriental, la “economía de mercado socialista” de China, la autosuficiencia de la India y la transición económica en Asia Central. Las deficiencias crónicas de la cooperación regional se deben a la juventud, dispersión y diversidad de los estados soberanos asiáticos. La emergencia de China amenaza con fracturar la región aún más. Aunque Asia Oriental está bien preparada para dirigir la recuperación económica a medida que la región se recupera de la crisis del Covid-19, sigue habiendo muchos retos. Los sistemas políticos y de gobierno son débiles. Las disputas territoriales, incluida la de Taiwán, podrían acabar convirtiéndose en conflictos abiertos. El capital humano está poco desarrollado y la población está envejeciendo. Por último, la región podría polarizarse entre Estados Unidos y China.